Alopecia androgénica masculina:

10 BARRAS (VERDADES) QUE NADIE TE CUENTA SOBRE TU PELO

Hoy abrimos expediente capilar para recoger, resumir y decantar todo el conocimiento clínico existente de la forma más accesible y directa posible: por qué se te cae el pelo, qué papel juegan tus hormonas (y tus genes), y cómo puedes frenarlo sin perder la cabeza… ni la autoestima.

1. EL PELO NO SE CAE: SE PRE-JUBILA

Tu melena vive en un ciclo continuo: crecimiento, descanso y caída. En una cabeza “sana”, el 85-90 % de los folículos están currando (en crecimiento). En una con alopecia androgénica, ese número baja: los folículos acortan su fase de crecimiento y, tras caer, renacen pelos cada vez más finos y débiles. No es que pierdas más pelo: es que cada generación de pelo nace más floja. El folículo se jubila antes de tiempo (expediente de regulación capilar).

2. EL 90 % DE LAS CALVAS DE TÍOS TIENEN APELLIDO: ANDROGÉNICA

Podemos culpar al estrés, la dieta o la contaminación; pero nueve de cada diez hombres con pérdida capilar tienen un mismo culpable: la alopecia androgénica. Es genética, hereditaria y con un componente hormonal tocho. Si tu padre o tus tíos lucen coronilla despejada, ya sabes por dónde van los tiros.

3. LA TESTOSTERONA NO ES EL PROBLEMA, ES SU PRIMA “RAVERA”: LA DHT

La palabra androgénica hace referencia a las hormonas del hombre, como la testosterona: esas que te dan voz grave, barba, libido...

Pues bien, hay una enzima, la 5-alpha-reductasa (no hace falta que te quedes con el nombre, solo con que es importante) cuyo “curro” es transformar testosterona en DHT, una versión de tres a cinco veces más hardcore. Como una fábrica de coches que solo produjera versiones turbo y tuneadas.

4. LA DHT TAMPOCO ES (SOLO) EL PROBLEMA; ES SU RELACIÓN ‘TÓXICA’ CON LOS FOLÍCULOS HIPER-SENSIBLES

La DHT tiene su función y en sí no es ni buena ni mala. PEEEERO hay algunos folículos de tu cabeza que son hipersensibles a la DHT. We miniaturizan: el pelo sale más fino, débil y se cae antes. Por eso hay hombres con testosterona alta y pelazo, y otros con niveles normales y entradas marcadas. No importa cuánto tengas, sino cómo reacciona tu cuero cabelludo a la versión hardcore de la testosterona.

5. LA CALVICIE TIENE MAPA

La alopecia androgénica no actúa al azar. Se apellida “masculina” porque ataca sobre todo la zona frontal (la “M”) y la coronilla. Ahí los folículos son más sensibles a la DHT. Por eso los trasplantes usan pelo de la nuca; porque esos folículos son inmunes y siguen creciendo felices incluso cuando los cambias de barrio.

6 FINASTERIDA Y MINOXIDIL FUNCIONAN… PERO NO SON PÓCIMAS MÁGICAS

El combo más recetado de medicamentos contra la ‘calvicie’ es finasterida (oral) + minoxidil (tópico).

  • Finasterida bloquea la enzima 5-alfa-reductasa (la que convierte a la testosterona en hardcore). Hay personas que reaccionan mejor que otras (no se sabe por qué) y estudios que relacionan el medicamento con bajón o pérdida de líbido, pero nada concluyente. Los efectos, si aparecen, suelen ser pasajeros.

    •    Minoxidil mejora el riego sanguíneo y alarga la fase de crecimiento. Se descubrió estudiando medicamentos para la hipertensión (plot twist médico). Si lo dejas, el folículo vuelve a su destino genético.
     

7. LOS COSMÉTICOS NO HACEN MILAGROS, PERO SÍ “MÚSCULO”

Los sérums, suplementos y champús funcionan… dependiendo de lo que lleven dentro. Hoy hay fórmulas como Follicool con activos clínicamente testados: péptidos biomiméticos, cafeína, Serenoa, Pygeum, niacinamida o biotina. No sustituyen a los fármacos, pero complementan y potencian los resultados. Piénsalo así: el cuerpazo de la Isla de las Tentaciones no se consigue solo en el gym; hace falta dieta, descanso y constancia.

8. CUANTO ANTES ACTÚES, MÁS PELO SALVAS

La alopecia androgénica es crónica y progresiva: los folículos activos se pueden recuperar; los inactivos, no. Cuanto antes empieces, mejor. La constancia es tu mejor tratamiento y la paciencia, tu mejor aliado.

9. NO ES ENFERMEDAD, PERO SÍ UN PEQUEÑO GOLPE AL EGO

Arriba los calvos, pero todo el que ha pasado por el proceso (lo haya abrazado finalmente o no) sabe que jode y toca el ego. La caída capilar afecta a la autoestima y a la percepción de atractivo (que sí, que los calvos ponen muchísimo… pero a nadie le mola el proceso de convertirse en uno). No se “cura” porque NO es una enfermedad. Solo se gestiona, si uno quiere. 

10. TUS GENES NO TE DEFINEN, LO MARCAS TÚ

Tus folículos pueden tener predisposición, pero tú puedes ser más cabezón que ellos. Con info, tratamiento y rutina, se puede frenar, mantener y mejorar la alopecia androgénica masculina. No es cura, es control.

#FOLLICOOL #STRONGERROOTS #FULLMANE #READYTOSIWON

P.D.: Si quieres mantener tu melena con ciencia y sin dramas, echa un vistazo a Follicool Serum: el tónico anticaída que usamos nosotros cada día para una melena anclada, nutrida y a pelo rendimiento.

Alopecia androgénica masculina:

10 BARRAS (VERDADES) QUE NADIE TE CUENTA SOBRE TU PELO

Hoy abrimos expediente capilar para recoger, resumir y decantar todo el conocimiento clínico existente de la forma más accesible y directa posible: por qué se te cae el pelo, qué papel juegan tus hormonas (y tus genes), y cómo puedes frenarlo sin perder la cabeza… ni la autoestima.

1. EL PELO NO SE CAE:
SE PRE-JUBILA

Tu melena vive en un ciclo continuo: crecimiento, descanso y caída. En una cabeza “sana”, el 85-90 % de los folículos están currando (en crecimiento). En una con alopecia androgénica, ese número baja: los folículos acortan su fase de crecimiento y, tras caer, renacen pelos cada vez más finos y débiles. No es que pierdas más pelo: es que cada generación de pelo nace más floja. El folículo se jubila antes de tiempo (expediente de regulación capilar).

2. EL 90 % DE LAS CALVAS DE TÍOS TIENEN APELLIDO: ANDROGÉNICA

Podemos culpar al estrés, la dieta o la contaminación; pero nueve de cada diez hombres con pérdida capilar tienen un mismo culpable: la alopecia androgénica. Es genética, hereditaria y con un componente hormonal tocho. Si tu padre o tus tíos lucen coronilla despejada, ya sabes por dónde van los tiros.

3. LA TESTOSTERONA NO ES EL PROBLEMA, ES SU PRIMA “RAVERA”: LA DHT

La palabra androgénica hace referencia a las hormonas del hombre, como la testosterona: esas que te dan voz grave, barba, libido...

Pues bien, hay una enzima, la 5-alpha-reductasa (no hace falta que te quedes con el nombre, solo con que es importante) cuyo “curro” es transformar testosterona en DHT, una versión de tres a cinco veces más hardcore. Como una fábrica de coches que solo produjera versiones turbo y tuneadas.

4. LA DHT TAMPOCO ES (SOLO) EL PROBLEMA; ES SU RELACIÓN ‘TÓXICA’ CON LOS FOLÍCULOS HIPER-SENSIBLES

La DHT tiene su función y en sí no es ni buena ni mala. PEEEERO hay algunos folículos de tu cabeza que son hipersensibles a la DHT. We miniaturizan: el pelo sale más fino, débil y se cae antes. Por eso hay hombres con testosterona alta y pelazo, y otros con niveles normales y entradas marcadas. No importa cuánto tengas, sino cómo reacciona tu cuero cabelludo a la versión hardcore de la testosterona.

5. LA CALVICIE TIENE MAPA

La alopecia androgénica no actúa al azar. Se apellida “masculina” porque ataca sobre todo la zona frontal (la “M”) y la coronilla. Ahí los folículos son más sensibles a la DHT. Por eso los trasplantes usan pelo de la nuca; porque esos folículos son inmunes y siguen creciendo felices incluso cuando los cambias de barrio.

6 FINASTERIDA Y MINOXIDIL FUNCIONAN… PERO NO SON PÓCIMAS MÁGICAS

El combo más recetado de medicamentos contra la ‘calvicie’ es finasterida (oral) + minoxidil (tópico).

  • Finasterida bloquea la enzima 5-alfa-reductasa (la que convierte a la testosterona en hardcore). Hay personas que reaccionan mejor que otras (no se sabe por qué) y estudios que relacionan el medicamento con bajón o pérdida de líbido, pero nada concluyente. Los efectos, si aparecen, suelen ser pasajeros.

    •    Minoxidil mejora el riego sanguíneo y alarga la fase de crecimiento. Se descubrió estudiando medicamentos para la hipertensión (plot twist médico). Si lo dejas, el folículo vuelve a su destino genético.

7. LOS COSMÉTICOS NO HACEN MILAGROS, PERO SÍ “MÚSCULO”

Los sérums, suplementos y champús funcionan… dependiendo de lo que lleven dentro. Hoy hay fórmulas como Follicool con activos clínicamente testados: péptidos biomiméticos, cafeína, Serenoa, Pygeum, niacinamida o biotina. No sustituyen a los fármacos, pero complementan y potencian los resultados. Piénsalo así: el cuerpazo de la Isla de las Tentaciones no se consigue solo en el gym; hace falta dieta, descanso y constancia.

8. CUANTO ANTES ACTÚES, MÁS PELO SALVAS

La alopecia androgénica es crónica y progresiva: los folículos activos se pueden recuperar; los inactivos, no. Cuanto antes empieces, mejor. La constancia es tu mejor tratamiento y la paciencia, tu mejor aliado.

9. NO ES ENFERMEDAD, PERO SÍ UN PEQUEÑO GOLPE AL EGO

Arriba los calvos, pero todo el que ha pasado por el proceso (lo haya abrazado finalmente o no) sabe que jode y toca el ego. La caída capilar afecta a la autoestima y a la percepción de atractivo (que sí, que los calvos ponen muchísimo… pero a nadie le mola el proceso de convertirse en uno). No se “cura” porque NO es una enfermedad. Solo se gestiona, si uno quiere. 

10. TUS GENES NO TE DEFINEN, LO MARCAS TÚ

Tus folículos pueden tener predisposición, pero tú puedes ser más cabezón que ellos. Con info, tratamiento y rutina, se puede frenar, mantener y mejorar la alopecia androgénica masculina. No es cura, es control.

#FOLLICOOL #STRONGERROOTS #FULLMANE #READYTOSIWON

P.D.: Si quieres mantener tu melena con ciencia y sin dramas, echa un vistazo a Follicool Serum: el tónico anticaída que usamos nosotros cada día para una melena anclada, nutrida y a pelo rendimiento.
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